En este día las mujeres celebramos la obtención de los mismos derechos civiles y laborales que los hombres, para poder desarrollarnos libremente como personas íntegras en la sociedad. El 8 de mayo de 1857 las mujeres que trabajaban en empresas de la industria textil en Nueva York, Estados Unidos, organizaron una protesta en reclamo de sus bajos salarios y las inhumanas condiciones de trabajo a las que estaban sometidas. En mayo de 1908, 15.000 mujeres salieron a las calles para exigir mejoras en el horario de trabajo, en el salario, el derecho al voto y el fin del trabajo infantil.
En la actualidad hay opiniones encontradas respecto si debería existir un día especial para la mujer, ya que esto acentúa la diferencias que se quieren evitar. Pero lo cierto es que estas diferencias existieron y aún existen en muchas partes del mundo donde las condiciones de sometimiento son infrahumanas.
Si bien el sometimiento no es patrimonio de las mujeres, sí es cierto que el patriarcado dejó a las mujeres en una situación de desigualdad en relación a los hombres. Y el machismo se cobró sus víctimas. Se ha violado el derecho más fundamental y esencial de todo ser humano que es la libertad de ser plenamente quien uno es y tener la posibilidad de tomar libremente sus propias decisiones. La imagen de lo que se suponía que tenía que ser una mujer estaba totalmente condicionada, mientras que los hombres en general, podían hacer pleno uso de su poder personal para someterlas. Sin embargo no es que los hombres quedaran fuera de los condicionamientos sociales y culturales. Pero hoy no nos vamos a ocupar de los hombres.
Tal vez este sea un muy buen día no sólo para que nos regalen una bella flor, sino para que reflexionemos sobre nuestras propias vidas, y pensemos:
- Si realmente estamos viviendo la vida que elegimos vivir.
- Si estamos donde queremos estar y con quienes queremos estar.
- Si nuestra autoestima está sana o si necesitamos ayuda.
- Si nos estamos sometiendo a algo o a alguien que no nos permite ser o expresarnos con libertad.
- Cuáles son los condicionamientos que no nos dejan seguir creciendo y que nos limitan.
- Si nos sentimos capaces de realizar los cambios que necesitamos realizar para traer más amor a nuestras vidas.
- Si contamos con una red de contención que nos permita atravesar los cambios y sentirnos acompañadas.